BMW M2 establece un nuevo récord en el Nürburgring-Nordschleife
El BMW M2 acaba de escribir una página en la historia del automovilismo al establecer un nuevo récord en el legendario circuito Nürburgring-Nordschleife. Con un tiempo asombroso de 7:38.706 en los 20.832 kilómetros de extensión de esta pista icónica, el M2 se convierte en el líder de su categoría en el mundo de los autos compactos.
BMW M2 y un logro impresionante
Este logro épico fue el resultado de meses de preparación meticulosa. Un equipo de expertos de BMW M se reunió en un soleado y frío domingo de abril, con todos los detalles de logística, viajes y preparación de los vehículos previamente planificados. El piloto del BMW M2, Jörg Weidinger, estaba listo para enfrentar el desafiante Nordschleife, un lugar de culto para los amantes del automovilismo y un campo de pruebas para los mejores automóviles del mundo. Después de todo, si un auto es rápido en el Nordschleife, lo será en cualquier pista.
Weidinger, ingeniero de desarrollo responsable de la puesta a punto de los modelos BMW M, recibió el apoyo de un equipo de siete colegas, personal en boxes y tres directores técnicos encargados del escrutinio técnico del vehículo y la coordinación de las vueltas en busca del récord. Este intento de récord oficial contó con la presencia de un ingeniero del TÜV (asociación de certificación técnica alemana) y un notario, quienes certificaron que el vehículo no había sido modificado y que todos sus componentes estaban disponibles en el catálogo de un concesionario BMW.
Jörg Weidinger superando límites
La búsqueda de condiciones climáticas ideales fue crucial, con la temperatura alrededor de 7°C para obtener el máximo rendimiento del motor BMW M TwinPower Turbo. Tras esperar a que los calentadores de neumáticos alcanzaran los 70°C, el equipo dio luz verde para entrar en la pista.
Después de la primera vuelta de calentamiento al mediodía, el éxito ya estaba al alcance, ya que Jörg Weidinger había batido el récord. Sin embargo, sabía que podía superarse aún más. Tras una breve pausa y revisar la presión de las cubiertas, Weidinger regresó a la pista con el BMW M2 en busca de un mejor tiempo. Al cruzar la línea de meta y realizar una vuelta de enfriamiento para refrigerar el motor y los frenos, todos se reunieron para conocer el resultado final. La celebración estalló, ya que el BMW M2 detuvo el reloj en 7:38:706, marcando un nuevo récord para BMW M.
Este logro no solo destaca la destreza de Jörg Weidinger como piloto sino también la excelencia en el diseño y la ingeniería de BMW. El BMW M2 no solo batió un récord, sino que también demostró por qué BMW es una de las marcas líderes en el mundo del automovilismo.
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